martes, 28 de febrero de 2012

Y te rompes poco a poco a la vez que te haces más fuerte. Ese puto juego agotador. Ese ya basta. Hasta aquí hemos llegado. El tonto hastío que siento al recordar tu puta voz, tu jodido bigote de las narices. TUS MENTIRAS. Que ya no se las cree nadie. Ni si quiera yo que lo hubiera dado todo por ti. Ni si quiera esas personas que te rodean que ni si quiera conocen una décima parte de lo que ya te conozco yo.

La verdad es que son sueños, que se rompen, que se quiebran. Que se van a pasear al dinosaurio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario